El costoso Parlamento y El Justicia de Aragón


Recuerdo con sorpresa, no exenta de indignación, cuando todos los parlamentarios “aldeanos” aragoneses acordaron ponerse sueldo, un sueldo de alrededor de tres mil euros mensuales, por aquel entonces, lo que multiplicado por 67 miembros, pagas extras, cotizaciones sociales, etc., supone una cantidad bastante elevada. Hubo unanimidad: PSOE, PP, PAR e IU estaban de acuerdo…

Anteriormente sólo cobraba salario la Mesa, es decir un reducido número de diputados, y los demás únicamente dietas y gastos de desplazamientos.

Algo parecido sucedió con su comisionado, El Justicia de Aragón. En una primera época, había un escaso número de asesores, de libre designación, bastante bien retribuido, y un reducido personal administrativo. A partir de un determinado Justicia, que tenía muchos amigos que colocar, él o su partido, se incrementó la nómina de asesores hasta los doce actuales, y el personal administrativo hasta diecisiete personas, incluyendo chófer, ujieres, escoltas, etc. Por supuesto con Palacio propio, coches oficiales, etc.

El siguiente Justicia nombró idéntico número de asesores que el anterior, y cuando se le recriminó en la prensa se limitó a decir que había nombrado exactamente los mismos que el anterior…, aunque el trabajo fuese escaso. Exactamente unas mil quejas al año, para un coste de la Institución de doscientos cincuenta millones anuales, lo que supone que la tramitación de cada queja tenía un coste de 250.000 pesetas…, de las de entonces.

Como yo decía irónicamente entonces, y reitero ahora, ¿no hubiera sido mejor darle a cada quejoso una subvención por ese importe y ahorrarnos la Institución, habida cuenta de su ineficacia, en general?

En resumen, lo que quiero decir es que hemos sobredimensionado las Instituciones. Las Cortes de Aragón en los últimos años si por algo se han caracterizado es por su escasa producción legislativa (lo que seguramente es de agradecer), por lo que no tiene mucho sentido en épocas de austeridad económica que los 67 diputados sigan cobrando por una dedicación exclusiva que realmente la mayoría no tienen, a excepción de la Mesa, y poco más.

Y tampoco tiene mucho sentido tener dieciséis asesores para tramitar dos mil quejas anuales, teniendo en cuenta que a una simple petición de información se le asigna número de queja, cuando únicamente se trata de saber cuantos aragoneses se han quejado a la Institución por no poder estudiar en Aragón la carrera que querían hacer (es un caso real, que me ha sucedido a mí mismo). En resumen, que se incrementa artificiosamente el número para justificar la función y el empleo. Espero que las facturas no las numeren también como quejas…

Estas manifestaciones las hago con todo respeto hacia las personas que dirigen e integran estas instituciones, y que estoy seguro hacen las cosas lo mejor que pueden.

El problema es que si hay que apretarse el cinturón, tenemos que apretárnoslo todos, y no solamente los parados, jubilados y funcionarios.

Por cierto, sigo sin saber cuanto se han bajado el sueldo nuestros diputados y el Justicia y sus asesores.

(Leo hoy en la prensa, 9 de junio, concretamente en Heraldo, un artículo de don José Luis Castro Polo, quien nos “informa” de que los 67 diputados aldeanos aragoneses han acordado “equipararse” a directores generales, a efectos del cobro del complemento especial de altos cargos, que supone según el articulista, unos mil euros mensuales más para todos aquellos que sean empleados públicos, durante el resto de sus vidas laborales. ¡Acojonante! La verdad es que no tengo palabras. Cada día coincido más con la opinión de mi padre, que con ocasión de una reunió de las Cortes franquistas dijo: ¡Ojala les caiga un rayo en el hemiciclo!).

Publicado por Sierra Norte Digital y Heraldo Sanitario de Oregón (10/06/2015)

comentarios
  1. carlos |
  2. Francha |