Código Penal

La acusación popular «molesta» a los partidos políticos

El derecho penal español contempla la existencia de hasta cuatro posibles acusaciones: la pública, encomendada al Ministerio Fiscal, la particular, a las víctimas del delito, la popular, a entidades que defiendan los intereses públicos, pero sin ser directamente perjudicadas por el delito, y la privada, meramente residual, únicamente para los delitos de injurias y calumnias, […]

Imputado e investigado son sinónimos pero acusado no

A propósito de la polémica en relación con la imputación del Presidente de la Comunidad Autónoma de Murcia, quisiera hacer algunas precisiones jurídicas o lexicológicas, que no es lo mismo, pero en este caso parece que sí. En primer lugar diré que desconozco que formación tiene el presidente de Murcia, en el supuesto de que […]

Los delitos de odio o la dictadura de lo políticamente correcto

Los llamados delitos de odio hacen su entrada en nuestro ordenamiento penal de la mano del PP, faltaría más, siempre en su papel de tontos útiles del sistema, siendo ministro de injusticia un tal Ruiz Gallardón, fiscal de carrera, pero político de profesión. En la reforma del Código Penal de 2015, teniendo el PP mayoría […]

La sentencia del caso Nóos: Demagogia, populismo e injusticia

Tenía la vana esperanza de pensar que hoy iban a cambiar un poco las cosas, y que se impondría el Derecho sobre el estado de desecho en el que vivimos, pero no ha sido así. Como soy pesimista, la verdad es que me temía, más o menos, lo que ha sucedido. Una sentencia extremadamente benigna para […]

El caso Blanquerna: Entre la política y la injusticia

Hace años, cuando era más joven, y posiblemente más tonto, o menos quemado por la vida, creía en la justicia humana. Ahora cada vez menos. Hoy por hoy sólo creo en la justicia divina, y con grandes dudas, pues viendo como va el mundo, presiento que Dios está de vacaciones una buena parte del año… […]

La excesiva dureza del Tribunal Supremo con los manifestantes en el sede de la Generalidad catalana en Madrid (y II)

En mi modesta opinión, el Tribunal Supremo se ha cubierto de lodo, una vez más. En lugar de adoptar una actitud de reproche penal, pero comprensiva con la escasa gravedad de los hechos, así como con la edad de los acusados (¿quién no ha hecho alguna barbaridad con veinte años?), el Supremo se inclina por castigarles […]